Las Razas

En este universo nos encontraremos con tres razas jugables distintas. Es muy importante tener en cuenta el tipo de raza escogido a la hora de interpretar al personaje, ya que cada una tiene su propio modus operandi, sus virtudes y sus defectos.

Son las que siguen:

Son la raza mayoritaria, y la verdad es que no hay mucho que decir sobre ellos; la mayoría desconoce la existencia real de las criaturas sobrenaturales y en general son ajenos a toda la existencia de la magia. Aunque, debido a la época en la que esta ambientada la acción, muchos creen a ciencia cierta en este tipo de sucesos por la educación que han adquirido.

A la hora de interpretar un humano debemos tener en cuenta qué relación guarda con la magia. Así, tenemos a los:


DOTADOS

Denominado así al humano que es capaz de verla y de comprender el tapiz de la realidad para cambiarlo a su antojo. Esta persona posee talentos naturales para trabajar con fuerzas energéticas de diferente orden; dicho talento, para ello, varía en cada persona. A la hora de elegir la edad de un personaje dotado hay que tener en cuenta algo muy importante: un adolescente puede tener mucho potencial a nivel energético, pero siempre va a errar mucho más que un mago experimentado, cuya sabiduría y conocimiento le permitirán realizar cosas más complicadas.


MUNDANOS

Humanos comunes y corrientes. No todos los humanos de la partida tienen por qué ser dotados, y algunos pueden tener conocimiento de lo sobrenatural; como los zíngaros y los inquisidores. También pueden simplemente ser nobles o comerciantes que ignoran por completo todo lo que esconde Venecia.


La posición de la mujer en la sociedad es algo vital para la coherencia del rol. En aquella época prácticamente se la consideraba una simple maquina de dar hijos; las aspiraciones de la mayoría eran encontrar un buen marido y cuidar de una buena casa. Las únicas mujeres que realmente tenían dependencia, e incluso tenían acceso a la cultura y las bibliotecas, eran las Cortesanas. Pese a que en la actualidad las veamos a veces como simples prostitutas, por aquel entonces tenían casi mas poder que los propios consejeros de los nobles y sus opiniones eran muy tenidas en cuenta. Las órdenes mágicas, por lo general, si tendrán en cuenta a las mujeres y su poder; pero procurad especializaros en combate mágico si lleváis a una dotada, y no físico. Muy pocas pueden prepararse en ese sentido, como por ejemplo las asesinas del Gremio.

El origen de los gattos se pierde en los albores del tiempo. Para los Stregas, todos ellos fueron creados por una lágrima que Diana derramó al presenciar los ultrajes cometidos contra sus hijas e hijos, cautivos todos ellos de los dioses de la guerra y sus oradores.

Sea ello cierto o no, lo cierto es que los practicantes de la Stregeria y los hombres felino han tenido muy buena relación desde que alcanzan sus memorias. Son frecuentes las familias de felino que se vinculan a pequeños grupos de stregas, ya que entre ellos eran tratados como iguales; inclusive como seres sagrados.

La lucha contra el paganismo y la imposición del Cristianismo mermó la población de stregas casi hasta su extinción, y las que quedaron tuvieron que esconderse. Muchos gattos se vieron abocados sin remisión a perder su hogar, y dado sus poderes canalizadores fueron presa fácil para los dotados que pretendían utilizarlos.

Fueron perseguidos, esclavizados por la mayoría de órdenes; tanto es así que en la actualidad es extraño encontrar un gatto en libertad. Se rumorea que en algún recóndito agujero de los canales de Venecia convive una pequeña comunidad de hombres gato libres, pero nadie lo ha constatado aún.

Los hombres gato tienen la opción de cambiar de forma, de humano a gato y a la inversa; así como formas intermedias. En cuanto a su ascendencia, pueden ser puros (padre y madre gatto) o mixtos (hijo de humano y gatta o viceversa); este último caso es MUY infrecuente, y puede suceder que el potencial mágico de un mixto no sea tan extraordinario como el de un felino puro; pero no siempre.

Conocedores de las artes mágicas; no son tan buenos con ellas como los dotados, pero son un enemigo a considerar en un enfrentamiento de tal naturaleza.

Situación actual

Si ya de por sí la situación de los gatto era insostenible, ahora la dificultad de ese modus vivendi se ha incrementado. Con el nuevo gobierno secreto de los Lotos y los vampiros, la "Purga" de los Centinelas se ha extendido no solo a los magos, sino a todo tipo de criaturas de esencia sobrenatural. Muchos gattos libres, demasiados, han sido cazados uno a uno, si no por los Hijos de Dios por los propios Lotos, ansiosos de incrementar su ya de por sí ferreo poder; o por los propios Rosacruces, seguros de que el fin justifica los medios si se trata de endurecerse y preparar una ofensiva contra sus hermanos negros. La esclavitud, sobretodo a manos de nobles, ha pasado de ser algo más que un nefasto destino; se convierte quizá en la única salvación posible.



Vida: Es su dote principal. Son capaces de percibir el tapiz de la vida y de modificarlo, de tal manera que son capaces de curar desde arañazos a brazos rotos con suma facilidad. Esto también les ayuda a conocer los puntos débiles de un enemigo en la lucha.

Comunicación con los espíritus de la Naturaleza: Tienen el don de comunicarse con todo ente cuyo espíritu sea primitivo y esté vinculado a las energías de la tierra. Este don les permite conseguir la colaboración de algunos seres elementales menores y algunos animales, así como la información de plantas y otras criaturas relacionados con la Naturaleza. Tienen la capacidad de ver fantasmas humanos y otros espíritus con los que carecen de afinidad; con estos no pueden comunicarse.

Esencia: Es el don de sentir el tapiz, o de canalizar las energías que se mueven en este universo y en el otro. En este caso, la especialidad de los hombres gato absorber la energía directamente del ambiente y cedérsela a un dotado para sus trabajos mágicos. También pueden crear pequeños círculos de protección, pero nada comparado con el trabajo de un autentico dotado.

* A veces, y debido a distintas circunstancias, el hombre felino es alcanzado por la corrupción de la maldad y la oscuridad; principalmente por verse obligados a trabajar con un mago corrupto. Son especialmente sensibles a las heridas causadas por magia oscura, siendo corrompidos por ella si no se cura a tiempo. Cuando esto sucede, quiebran su afinidad con la Naturaleza y sus espíritus se vuelven invisibles y mudos ante sus ojos. Este corte de comunicación resulta un duro golpe para ellos.

Ante este fenómeno pierden también su facilidad para curar, adquiriendo capacidad para lo contrario. También se destruye su don para absorber energía de la propia tierra, teniendo que beber de la vitae espiritual de otros seres vivos (principalmente humanos y con contacto sexual de por medio). En consecuencia, muchos apodan a esta variedad de felinos íncubos y súcubos.

Vástagos, Hijos de la Noche, Condenados, Hijos de Caín... Más comúnmente conocidos como "vampiros". Después de siglos de existencia, atraídos por el olor de la sangre fresca, no es de extrañar que los encontremos ocultos entre las multitudes o tras las máscaras de los carnavales de la Venecia Renacentista.
Muchos han sido los cuentos y mitos que han ido desfigurando al vampiro a lo largo de los años. Pero, a pesar de lo que digan las historias, las caracterísitcas de estas oscuras criaturas pueden resultar incluso obvias para quien aprenda a reconocerlos.

Poderes

Los vampiros, antes de convertirse en depredadores nocturnos, fueron personas, humanos... condenados a vivir eternamente en la oscuridad nocturna, manteniendo siempre el mismo aspecto que poseían cuando fueron Abrazados, el mismo corte de pelo, el mismo estado físico, la edad aparente... Nunca envejecen, no tienen cicatrices ni marca alguna en la piel, son inmortales.

Tienen apariencia humana, aunque con ciertos tintes diferenciales... Su piel es blanca como la porcelana, sus ojos son brillantes y seductores, su mirada fiera y misteriosa, sus uñas se vuelven cristalinas y duras como el diamante, poseen colmillos superiores que alargan a voluntad... Son terroríficamente hermosos y atrayentes para los mortales, pues pocos son los que pueden librarse de los encantos de un vampiro, de su olor, su voz, su presencia. Constituyen un grupo de adversarios temibles, pues además, los vampiros poseen una fuerza sobrehumana y una agilidad y rapidez de movimientos casi imposibles, que convierte cada gesto en una caricia sutil y fluida al viento.

Los vampiros se curan muy rápido, y pueden usar su saliva para cerrar heridas no demasiado profundas en los humanos.
Algunos vampiros tienen otros poderes que van desarrollado a medida que la sangre envejece. Presencia, les hace capaces de rendir toda una corte a sus pies con el mero hecho de aparecer en la sala, que le idolatren o le teman como a un Dios. Dominación, para controlar las mentes de los mortales sin que puedan resistirse y conseguir sus propósitos a través de otros. Animalismo, escuchan y entienden la llamada animal, se comunican con todo tipo de animales, y pueden metamorfosearse en lobo o en murcielago (solo se puede escoger uno).

Debilidades

No os dejéis engañar por las apariencias. Los vampiros están muertos, no respiran, no les late el corazón, sus cuerpos son mortalmente gélidos, no transmiten ningún impulso por lo que no tienen ondas cerebrales que puedan ser dominadas o leídas por los telépatas, lloran sangre, incapaces de derramar lágrimas... Son almas condenadas dentro de una carcasa de carne muerta. Son los depredadores de los humanos.

Pero ser inmortal no significa ser indestructible. Todo su poder queda solapado por sus grandes debilidades. La primera debilidad, la más obvia, y también la más intensa, es la sangre. Un vampiro tiene que alimentarse de sangre, como sea. Los vampiros jóvenes e inexpertos a menudo comenten atroces asesinatos debido a su falta de control. Otros no soportan beber sangre humana por culpabilidad y subsisten a través de sangre animal. Los vampiros más viejos pueden controlar su sed de forma mucho más encomiable, pero conseguir ese autocontrol es muy muy muy difícil La sed se vuelve muy, muy insoportable en ocasiones, y resistirse a ella es todo un reto, sobre todo teniendo en cuenta que la sensacion de un vampiro al alimentarse es más placentera incluso que un orgasmo.

Pasarse demasiado tiempo sin beber sangre implica debilitarse lenta y agónicamente, hasta caer en letargo, incapaces de despertar hasta que alguien les de sangre para revivirlos.

Su siguiente debilidad inmediata es la luz del sol, letal para ellos. Razón por la cual duermen durante el día (por que sí, los vampiros duermen). Cuando los rayos del astro solar impacta contra ellos, éstos sufren terribles quemaduras, y acaban estallando en llamas y ardiendo hasta que quedan reducidos a cenizas. Algo parecido ocurre con el fuego. Tanto al sol como al fuego, los vmapiros les tienen un pavor visceral.

Los vampiros son alérgicos a la plata, tocarla produce graves heridas y quemaduras corrosivas que les debilitan y anulan sus poderes mientras dure el contacto con el metal.

La fe verdadera, la fe en Dios todopoderoso, puede debilitarles también, repelerles, o volverles incapaces de dañar a la persona que creen ciegamente en Él.

Las estacas... certeramente clavadas en el corazon pueden provocar la parálisis completa del vampiro y la anulacion de sus poderes. Pero no los matan.

De la misma forma, cortarle la cabeza a un vampiro tampoco asegura su muerte. Quizá así logres cargante a un vampiro joven, pero no contaría con eso si te enfrentas a un vástago de edad avanzada.

Los vampiros tambien son físicamente incapaces de entrar en una casa privada (no vale una taberna, un salón de baile o un teatro, por ejemplo) de un mortal sin ser previamente invitados, y están obligados a marcharse si les echas.

No tienen reflejo.

Por último, son sensibles a la magia de esencia.

El resto: dormir en ataúdes, crucifijos, ajos, agua bendita, arroz... son todo mitos. De la misma forma que no se convierte a uno en vampiro sólo mordiéndole. El proceso es largo y complejo, llamado Abrazo, en el que el humano dispuesto (o no) a ser convertido en vampiro debe estar a las puertas de la muerte, ya sea por una herida, una enfermedad, o simplemente porque el vampiro se ha alimentado de él hasta dejarlo casi muerto. Entonces, el vampiro derrama unas gotas de su propia sangre para que entre en él, y durante una noche completa, su cuerpo muera lenta y dolorosamente, hasta despertar como cainita a la noche siguente.

Agrupaciones vampíricas

Los hijos de la noche normalmente se mueven de forma independiente, algunos viven en solitario, otros en pequeños aquelarres. Unos prefieren conservar lo que les queda de humanidad, y otros se acaban convirtiendo en sádicos mosntruos de pesadilla. Pero existe cierta jerarquia dentro del orden social vampírico: el vampiro más viejo, y por consiguiente, más fuerte, está por encima del resto. El chiquillo recién creado nunca podrá estar por encima de su sire, el vampiro que le convirtió. Y por lo general, en cada gran ciudad reside un vampiro viejo y poderoso al que llaman Príncipe, que reina sobre todos los vástagos de la ciudad en cuestión...

Sin embargo, cada vampiro es un oscuro mundo distinto, y por ello cada cual, interpreta las normas a su manera:

Siervos del Príncipe: En Venecia, el Príncipe vampiro es Zeihar Ith'Inarien. Es uno de los más viejos y más poderosos de la ciudad, y es reconocido por la mayoría de los inmortales... y temido por la mayoría de los ingenuos humanos. Hace tres años se dio a conocer de entre las sombras, y exigió a todos los vampiros obediencia y lealtad, a cambio de un nuevo y próspero futuro; cosa que, en cierto modo,consiguió: Todos ellos saben que la alianza del Príncipe con el Loto Negro les ha asegurado una mayor influencia y prosperidad, una libertad sin parangón; si bien, no todos los vampiros terminan de fiarse de estos oscuros magos traicioneros ni creen que los nuevos "cambios" sean del todo beneficiosos para ellos, y, aunque acatan a rajatabla las órdenes de su Príncipe (unos por lealtad, y la gran mayoría por miedo), no siguen los ideales ni los planes del Loto, lo cual, cada vez mas a menudo, puede llegar a resultar contradictorio.

Siervos del Loto Negro: debido a que hoy en día la alianza entro los vampiros y el Loto es más que palpable, muchos han sido los inmortales que, siguiendo el ejemplo de su señor, se han aliado con el Loto Negro y trabajan codo con codo con sus miembros, provocando el caos en la Ciudad y repartiéndose los botines a medias. Han sido los principales responsables de las diableries cometidas contra el pueblo de Venecia, y son los principales soldados del Loto para combatir a sus enemigos: los Centinelas y los Rosacruces. Muchos son los que han intentado atraer a nuevas pobres almas mortales hacia su causa. Algunos incluso se han convertido en verdaderos fanáticos, y empiezan a no distinguir entre la lealtad a su Príncipe, su Estirpe, o a la propia Secta. Desde luego este número de inmortales fanáticos es bien reducido, pues, ¿qué puede aprender un no-muerto nocturno de los muertos y las artes oscuras que no sepa ya?

Vampiros Desertores: estos vampiros no son "los buenos" entre un mundo perverso dominado por la sed y la perversión, ni mucho menos. Sencillamente son partícipes de las antiguas constumbres, y no están de acuerdo con la nueva alianza entre brujos nigromantes y no-muertos. Su naturaleza es a la vez afín y contraria a estos magos de las artes oscuras, y no se fían de ellos ni de sus tratos con el Príncipe Ith'Inarien, al que no respetan como tal, ya que creen que como Príncipe es tiránico y demasiado poco atento a la verdadera necesidad de todo inmortal: pasar desapercibido ante los humanos.

Son criaturas solitarias, nómadas, que viven a escondidas tanto de mortales como de inmortales, considerados monstruos por unos y traidores por otros. La Caza de Sangre contra ellos está levantada desde el principio de la Alianza con el Loto, y la orden es clara: todos los vampiros que se crucen con un Desertor debe matarlo y entregarle su cabeza al Príncipe. Cualquier indicio de confabulación se considerará también traición.

Apuntes sobre la edad

Al loro con la edad de los vampiros. El Príncipe Vampiro de Venecia ronda los 500 años de existencia, y no en vano es el más poderoso y por algo está en donde está. No podéis ser más mayores que el Príncipe Vampiro. Tened en cuenta que un vampiro con 100 años ya es un vampiro bastante over, así que sed un poco racionales y no os hagáis un bicho de 300 años sólo para ser poderosos. Los vampiros jóvenes tienen bastante más jugo que los viejos, creo yo, y están lo suficientemente locos como para intentar destronar al actual Príncipe que uno que sabe que NO es para nada buena idea XD

Grupo limitado

IMPORTANTE: La Administración se reserva el derecho de administrar y denegar plazas para la raza vampírica debido a influencias en la trama y su nivel de poder. Sentimos las molestias.