Nidia Da Firenze

por **Nidia Da Firenze** Mar Dic 21, 2010 2:57 am

-Nombre: Nidia Da Firenze

-Edad: 22

-Sexo: Femenino

-Raza: Humana Dotada

-Órden: Stregeria

-Equipamiento: A parte de las herramientas básicas de su Orden, suele llevar una daga oculta entre su ropa, manía que los miembros del Gremio acabaron inculcándole. Además, suele llevar bolsitas con hierbas y polvos y frasquitos con venenos.
Lleva un collar con una piedra de aguamarina, el cual le regaló su padre, ya que simbolizaba esperanza y protección. Tiene más valor sentimental que mágico, por lo que nunca se lo quita.
Por último, lleva un saquito lleno de piedras semipreciosas, cuya utilidad es potenciar sus poderes curativos.

-Habilidades de Combate: Más que habilidades en la lucha cuerpo a cuerpo en sí, Nidia es bastante escurridiza, debido no sólo al conocimiento de las calles por sus juegos de infancia, si no también por su constitución. A pesar de eso, los del Gremio la enseñaron a defenderse, instruyéndola en el manejo de dagas y varas de madera. A parte de su agilidad, cabe destacar su velocidad de reacción, centrada más en la búsqueda de vías de escape que en el contraataque.

-Aptitudes mágicas: Lo que mejor se le da a Nidia, son sin duda, el don de la vida y la esencia. Sus estudios se centraron en potenciar la sanación debido a su entorno, convirtiéndola a su vez en una experta en medicina, no sólo capaz de reconocer cualquier planta, si no de crear antídotos y venenos sofisticados difíciles de detectar. Controla bastante bien los círculos de protección, aunque sin duda, los de atadura y restricción son su especialidad.
Se negó a profundizar en la comunicación con los espíritus humanos, prefiriendo hacerlo con los de la naturaleza, teniendo una mayor afinidad con ellos, y consiguiendo su colaboración sin dificultad.
La clarividencia no es uno de sus dones, ya que no nació con él, a pesar de que ya de por sí, no tenía interés alguno en conocer el futuro.
La fascinación se desarrolló de forma inconsciente en Nidia y ni siquiera tiene control sobre ella. Aparece y desaparece como le place.

-Descripción física: Nidia es de estatura normal, de apreciables curvas y suave tez pálida cubierta de pecas. Sus ojos son de color verde grisáceo, enmarcados por unas largas y tupidas pestañas. Sus cabellos rojizos le llegan hasta la cadera, rizados, cayendo sin orden aparente. De rasgos suaves y ligeramente aniñados, que le dan un aspecto ligeramente infantil, contrastado por sus labios y el brillo inteligente de sus ojos verdes.

-Descripción del carácter: Nidia es un espíritu libre, fácil de complacer y difícil de entender a veces. Es una joven inteligente, perspicaz, astuta y con buen temperamento, a pesar de su carácter servicial, siempre dispuesta a ayudar a los demás anteponiéndolos a su propio bienestar. No es una persona egoísta ni avariciosa, se conforma con su situación sin desear algo más. Optimista, sabe buscar el lado positivo a todas las cosas. Con mucha seguridad y confianza en sí misma, suele ser una persona difícil de irritar, por lo que más que hacer uso de la violencia, en las circunstancias que superan su paciencia, saca a relucir su temperamento mediante pullas verbales y un ácido sarcasmo.
Por lo demás, es una mujer tranquila, con buen sentido del humor y buena conversadora, que a pesar de todo, sigue conservando cierta inocencia y esperanza en el ser humano.

-Gustos y preferencias: Es muy fácil de complacer, por lo que no es raro verla disfrutar por el simple hecho de llover o de correr por los bosques. Le gusta caminar descalza por la hierba, los animales y subirse a los árboles. Le gustan los libros, las historias de otros países y su mitología, los trovadores y la música en general.

-Breve historia del PJ: Nidia era hija de un próspero comerciante de especias y de una bruja strega, un matrimonio joven de clase media-alta. Tuvo una infancia feliz, llena de pequeños lujos como premio por su trabajo y por su aprendizaje junto a su madre en las temporadas en las que su padre estaba ausente por negocios.
Al cumplir sus 12 años, las cosas en apariencia mejoraron. Su familia había ganado mucho dinero, e incluso ella tenía un matrimonio concertado con un joven y apuesto conde, más de lo que cualquier chica en su época podría desear.
Pero todo cambió en una noche. Los barcos de su padre se hundieron en una tormenta y él con ellos. Durante los próximos meses, su vida dio un vuelco muy brusco. Su madre entró en una depresión, encerrándose en si misma, mientras relegaba la educación de su hija a las sacerdotisas de la Orden, que la instruyeron intensamente en las diversas artes, tras haber visto el futuro que le deparaba.
En ése mismo año, se supo que su madre acabó siendo corrompida por el lado oscuro, engrosando al poco tiempo las filas del Loto Negro. Ésta circunstancia le fue vedada a Nidia, enmascarándola bajo la tapadera de un simple suicidio. Y es que si la niña daba por muerta a su madre, habría menos posibilidades de que acabara como ella. El caso, es que Nidia, pasó a manos de la Orden, las cuales, tras varias reuniones intentando decidir su destino, convinieron que sería bueno para ella y también para reafirmar las alianzas, tener una strega dentro del Gremio de Asesinos de la ciudad, al servicio de sus líderes.
Tras los primeros años de forzosas relaciones por ser una extraña entre ellos, pasando como propiedad de un asesino a otro, acabaron por aceptarla como una más, incluso le enseñaron a defenderse y a utilizar armas blancas como defensa, ya que ella se preocupaba por todos los componentes de la organización. Entabló muchas amistades entre los miembros, ganándose su confianza y sintiéndose de nuevo como en su hogar. Finalmente, acabó siendo cedida a Fahd 'Umbra' Hasshîm a la edad de 16, aunque no por ello dejó de servirlos a todos.
La situación de los stregas fue empeorando con los años, aunque no la afectaba directamente ya que pocas veces abandonaba el Nido. Pero las cosas fueron a peor, y día tras día, sus hermanas fueron cayendo, hasta que la suma sacerdotisa las acompañó, dejando a las restantes algo alteradas.
Nidia fue de las pocas que mantuvo la calma, volviéndose más precavida en sus salidas, mientras su lealtad se veía dividida entre la Orden y el Gremio.

-Otros: Sabe hablar varios idiomas, leer, contar y escribir, además de ser una buena tasadora (lo aprendió todo de su padre).
Algunos miembros del Gremio la instruyeron en la lucha, por lo que tiene un buen manejo de las armas blancas. No le gusta la violencia, pero sabe defenderse.