Re: Il giardino delle fate

por **Eleutherios Gaunthier** Sáb Abr 24, 2010 12:17 pm

-Oooh... yaa veoo... - Eleutherios asiente riendo ligeramente - ya veo, ya veo. Es decir, oigo. Eres un vampiro, ¿qué decir? Me lo imaginaba... Tienes todas las características, ya sabes. - Esto último lo dice con exagerada confidencialidad, poniendo la mano a un lado de la boca mientras lo dice.

Lo mira con una sonrisa y le giña un ojo, le enseña al bardo su colgante amatista - ¿Lo ves, amigo? Significa que soy un centinela, un guardián de la oscuridad. Soy un aliado de los cazavampiros y de los stregeria pero no me meto en su basura. Voy por libre. Si un ser de la oscuridad no hace nada malo delante mía, no me meto con él.

Automáticamente hace un puchero.

-¡Imagínate! Pobres seres de la oscuridad, ellos tan tranquilos, paseando, ¡como tú ahora mismo, salvándome del tedio! y de repente viene un molesto centinela e intenta asesinarlo... ¡Qué poco elegante! Y desagradecido. Yo no soy un desagradecido, porque no soy una alcachofa. Aunque debo añadir que la remolacha es ciertamente arisca... - Eleutherios acaba de perder el hilo de la conversación pero inmediatamente lo recupera y ríe. Se vuelve hacia el bardo y acaricia uno de sus rizos color cobre, lo huele.

No es como la rosa blanca, éstos rizos sí huelen, sí tienen esencia.

Vuelve a recitar en voz baja.

Larga noche, es su consciencia,
largo caminar en sus pies,
en su apariencia,
así va el trovador,
desgastando en el camino,
hasta la última gota
de su sacra esencia...

por **Iacovo C. Mika** Sáb Abr 24, 2010 12:25 pm

Se lleva un brazo a la frente con teatralidad mientras suspira y se deja caer hacia atrás, a nada de dejarse la nuca en el suelo. Vuelve a su posición original sobre el banco y vuelve a sus pirar mientras observa el colgante con curiosidad. Podría tomarlo prestado algún día. Si Stuart le dejaba, claro...

- Oh, es duro ser un hijo de la noche. Vas de acá para allá, ganándote la vida e intentando...no requetemorir. Y de pronto ¡zas! te asaltan sin piedad. No comprenden que tenemos sentimientos... - Deja, de forma completamente intencionada, que una lágrima de sangre se deslice lenta y perezosamente por su mejilla. No por nada llegó a ser bardo. El mundo entero debería aplaudir su talento interpretativo.

Observa al hombre en silencio con la mirada afilada y la sonrisa aún más.

- Sacra esencia... - Balancea las piernas sonriendo como el inocente niño que hace ya tanto tiempo dejó de ser - Por devolver un favor devuelto, he de devolver el devuelto favor y por lo tanto os pido, Stuart, que si alguna vez lo recordáis podéis llamarme Corpsagoddo.

por **Eleutherios Gaunthier** Sáb Abr 24, 2010 12:35 pm

Eleutherios lo mira, por primera vez, lo ve.

-Corpsagoddo, me gusta como suena, a Dios pagano o algo por el estilo... - ríe un poco y sin cortarse lleva una mano a su barbilla - Voy a besarte, posiblemente intente hacer más, espero que estés de acuerdo. Es sólo el proceso burocrático, ya sabes...

Y le besa, limpiando la lágrima de sangre, no espera a escuchar una respuesta, desde fuera se vería como un señor alto y rubio besa a un niño de la calle, lo cual no era tan raro en los tiempos que corrían y que no por eso dejó de parecer inmoral e indecente.

por **Iacovo C. Mika** Sáb Abr 24, 2010 12:44 pm

Sólo le da tiempo a esbozar una sonrisa mordaz antes de que los labios de Stuart sellen los suyos. Puede oír, a su izquierda, el gritito de una mujer que probablemente fuese a pasar justo por ahí. Porque eso podía ser bastante normal teniendo en cuenta los tiempos que corrían, pero sigue siendo inmoral. Sonríe antes de apartarse e inclinarse apartando el pelo rubio y pasando la nariz por el cuello de Stuart.

- Voy a morderte. Y me da igual que estés de acuerdo o no. - Desliza los colmillos desde la parte inferior de la oreja de Eleutherios hasta el lugar donde puede sentir el pulso latir. Huele la sangre y casi puede sentir su sabor en la lengua antes de clavar los colmillos. La primera gota de sangre baña su lengua y alza las manos para cerrar los puños sobre la opulenta y colorida ropa de Stuart.

por **Eleutherios Gaunthier** Sáb Abr 24, 2010 12:47 pm

Pensó que era una experiencia excitante, la de ser mordido por un vampiro. Un centinela recibiendo el abrazo. ¿Quién lo diría?

Una risa casí maníaca salió de los labios de Eleutherios, su garganta vibró y sintió los colmillos hundirse más con ese movimiento. ¿Sabría bien su sangre o sería alcachofada? Tal vez era del tipo remolacha, o más bien cogollo o brocoli. Sí, a él le pegaba el brocoli.

-Aprovecha bien la sangre Corpsagoddo porque es probable que no vuelvas a probarla.

por **Iacovo C. Mika** Sáb Abr 24, 2010 12:52 pm

No bebe por sed. Podría decirse que está cayendo en la gula, en el beber por el beber. Es una sangre curiosa. Así como cada ser humano era diferente, también su sangre lo era y esa no tiene un sabor definido. Es una mezcla que baila en su lengua.

Separa los colmillos de la piel y lame por última vez la herida antes de mirarle con una sonrisa escarlata, pasándose la lengua por los colmillos. Es una sonrisa casi macabra aunque Iacovo normalmente sea jovial y alegre.

- ¿Y tú? ¿Tendrás tú de nuevo la oportunidad de probrar... - acerca sus labios manchados de sangre a los de Eleutherios sin borrar del todo su sonrisa - ...tu propia sangre?

por **Eleutherios Gaunthier** Dom Abr 25, 2010 7:14 am

Eleutherios ríe contra sus labios y le besa lamiendo con gula su propia sangre. Definitivamente no sabía a alcachofa. Coge de la nuca a Corpsagoddo y separa sus labios casi con esfuerzo.

-¿Os gustaría visitar el caserón Gaunthier? Si lo deseáis, podéis ser el invitado de honor esta noche, a no ser que tuviéseis otros asuntos que atender...

por **Iacovo C. Mika** Lun Abr 26, 2010 8:50 am

Entre alegres risas, Iacovo se levanta de un salto impulsándose con los brazos y se queda de pie dándole la espalda con los brazos estirados.

- Eso dejó de divertirme hace siglos, Stuart - Se le escapa una risilla y le mira por encima del hombro, burlón - Literalmente.

Gira con un paso danzarín, cruzando los brazos tras la espalda.

- No me interesa tu oferta. Tengo un lugar al que volver. Un lugar en el que alguien me espera.

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