Scipio

por **Scipio** Lun Oct 12, 2009 10:13 pm

-Nombre: Apodado Scipio, desconoce su nombre real. También lo llaman 'Scip' aunque solo Andreas se atreve a hacerlo así. (Más adelante cuando lo descubra editaré)

-Edad: Desconocido también, no sabe en que año nació, y debido a su mala memoria posee pocos recuerdos de la infancia. Por su aspecto debe rondar los 14 o los 15 años.

-Sexo: Varón.

-Raza: Gatto, aunque sabe que es diferente, no quiere admitírselo a si mimo.

-Órden: Ninguna.

-Equipamiento: Una máscara veneciana que le oculta el rostro cada noche, tejida con hilos de plata. Este es el primer objeto que robó, el cual luce como trofeo cada vez que comete un hurto. También lleva siempre consigo un puñal en el cinto, el único objeto con el que lo abandonaron, lleva unos extraños símbolos en la empuñadura pero no tiene idea de que significan. También lleva una pequeña bolsa de arena al lado de la daga para poder jugar sucio y así cegar de quien tenga que escapar.

-Aptitudes mágicas: Scipio es un diamante en bruto en cuanto al despertar de dones se refiere. Tiene un gran potencial aún por explotar y un gran cúmulo de energía en su interior. Habiendo utilizado solo el 10% de sus capacidades en su vida diaria, explorando estas por su propia mano sin llegar a poder utilizarlas correctamente al no tener un tutor para enseñarle como hacerlo y tener 0 información sobre quien es realmente.

-Descripción física: Scipio es un chaval lo suficientemente alto para su edad como para sobresalir de la media, aún así suele caminar encorvado, con desgana y con ello ese dato pasa desapercivido. Lleva el pelo marrón chocolate algo largo ya, mal cortado, con un flequillo algo rebelde que le tapa la frente y parte de un ojo. Sus ojos son de una tonalidad más oscura que su cabello, parecida al chocolate negro fundido, intensos y profundos. Pocas veces se le puede ver sonreír y sus carnosos labios solamente se curvan en una sonrisa traviesa al ver ante si la oportunidad de desvalijar a alguien. Su piel está ligeramente bronceada adquiriendo un saludable tono dorado, aunque algunas veces tras largos periodos de exposición al sol, suele surcarle en forma de antifaz el rostro unas curiosas pecas. De cuerpo fuerte pero bastante delgado, ideal para colarse en las casas y escabullirse con facilidad.

-Descripción del carácter: Demasiado maduro, realista y serio para su edad. Scipio es un chico desencantado con el mundo. Si la infancia no ha existido en su corta vida, mucho menos lo hace la adolescencia, puede que porque por mucho que aparente ser un hombre hecho y derecho sigue siendo muy en el fondo el crío que nunca se permitió ser. No entiende de sentimientos, no siente interés por el sexo opuesto y mantiene a raya los cambios hormonales y psicológicos que se dan en su cuerpo últimamente, poniendo la mente en otra parte y centrándose más que nunca en sus actos vandálicos.

Es un muchacho seguro de si mismo ante todo, muy inteligente y astuto. Tiene un fuerte poder de liderazgo que solo utiliza en casos extremos, protegiendo y llevando por el mejor camino, según su punto de vista, a sus amigos. Su seguridad suele contagiarla a los de su alrededor, dotándolos de confianza en si mismos y de una valentía inusitada. De fiero carácter, no soporta ser dominado y mucho menos utilizado, de ahí que se haya negado a trabajar para esos adultos que tanto detesta y a los que culpa de todos sus males. Actúa de padre y hermano con los suyos aunque en realidad lo que en lo más hondo de su corazón quiere ser, es un hijo. Fiel para/con los chicos, no soporta la traición y la debilidad, de ahí que los vuelva fuertes y les haga olvidar que en realidad son niños, aunque para facilitar la tarea a sus consciencias, trata todo el tema de su supervivencia como simples juegos, inventándoselos sobre la marcha para ocultar el peligro en el que viven día a día.

Niega y oculta sus diferencias con el resto. Explorando sus poderes por su cuenta en esos momentos en los que se aparta para pensar o pasear. En realidad no soporta lo sobrenatural, la magia y los dotados, a los cuales considera simples cuentos de hadas o de miedo para niños ricos.

-Gustos y preferencias:

~ Quiere ser mayor, no soporta que lo traten como a un crío y es por eso que durante las noches se dedica junto a sus amigos a llevar a cabo su vendetta personal contra esos adultos que los infravaloran y tratan como escoria.

~ Le gusta estar solo, a menudo se aísla del grupo y pasa momentos a solas, como si necesitase aire y espacio personal para pensar.

~ Colecciona trofeos en su habitación de todos los robos que ha cometido, desde simples plumas a sombreros.

~ Tiene un amigo especial. Un murciélago que ve de vez en cuando por la fachada del teatro y al cual ha bautizado como 'Leonardo'. Le suele hablar, contándole confidencias, desahogándose, sin saber que es realmente.

~ Le apasiona el teatro, y se sabe al dedillo todas las obras que representan en el suyo, aunque es un pésimo actor, dado que suele expresar menos sentimientos que las tablas de madera bajo las que vive.

-Breve historia del PJ: Abandonado a la orilla de un canal, Scipio fue recogido por una mendiga que poco pudo ofrecerle, cuidándolo hasta los cinco años, que falleció. En realidad era hijo de un miembro del Loto Negro que perdió la cabeza y una Gatta, que fue ejecutada posteriormente por traidora al haber abandonado al crío, salvándolo de que lo mataran por creerlo una abominación. (Si esto es una flipada lo borro que era por poner algo xD)

Scipio tuvo que ganarse la vida como le había enseñado su madre postiza, pidiendo y utilizando su apariencia de infante para sonsacarle dinero a los transeuntes más adinerados que se compadecían de él. Pronto aprendió que robar le daba más beneficios que mendigar y con los años la práctica lo convirtió en lo que es hoy en día.

A los nueve años se junto con más chicos, algunos huérfanos, otros mendigos, otros escapados de centros, formaron un grupo que estafaba, engañaba y robaba, compartiendo entre ellos sus habilidades y sus técnicas para hacerlo. Un viejo anciano que regentaba un teatro los acogió tras pillarlos en un intento de robarle, a cambio ellos, le reportaron con beneficios y hicieron publicidad de su teatro. Cuando el anciano murió el hijo de este volvió del extranjero para hacerse con el lugar, echándolos de allí, aunque realmente lo que estos hicieron fue trasladarse a los bajos del edificio, ocultando su presencia al amo del teatro, viviendo allí a sus espaldas.

-Otros:

~ Debido al poco dinero del que disponen, todos los chicos visten ropa de adulto de las casas en las que roban. Teniendo que hacer dobladillos, zurcidos para amoldarla a sus propios cuerpos, dándoles a toda la panda un aspecto de lo más cómico y extravagante.

~ Vive junto a unos cuantos chicos en la parte baja de un viejo teatro, se apodan a si mismos ''Niños Perdidos'' y la media no supera los 16 años de edad. Son todos varones, o eso creen ellos y por las noches se dedican a robar en las casas mientras que por el día, aparte de dormir sus horas, cambian el material expropiado por alimentos, agua y dinero.

~ Aunque pueda aprenderse obras de teatro de carrerilla y conocerse las calles de Venecia como la palma de su mano, tiene pésima memoria para cosas trivales, como nombres, horas, fechas y recuerdos de su pasado.